martes, 30 de julio de 2013

Pacific Rim y los blockbusters



 ¿En qué momento las películas que costaban alrededor de 100 millones pasaron a costar entre 180 y 250? ¿Cómo un blockbuster como “Matrix” costo en 1999 menos de 100 millones y una peli de similares características como “John Carter” cueste 250 millones en menos de 14 años de diferencia? Y no me digáis que por la inflación porque no es cierto. Si fuera por eso estaríamos hablando de pasar de 90 a 120 no a 250.
Echemos la mirada un poco hacia atrás. Hasta finales de los 90 y comienzos del siglo 21, las pelis tenían un coste de producción límite que oscilaba en torno a los 100 millones de dólares. Era lógico. Para recuperar una inversión de 100 millones en cine hay que recaudar entre 3 y 4 veces el presupuesto original. Esto depende en gran parte de quien está detrás de la película si es una mayor (que es a la vez distribuidora y co-productora del film*) que amortizara mucho antes la peli que si solo es una productora.  Entonces estamos hablando de recaudar 400 millones de dólares, que una vez descontados los gastos de distribución, los costes de promoción, los porcentajes de distribuidores y exhibidores nos daría la mágica cifra de 100 millones. A partir de ahí en adelante hablaríamos de beneficios.  ¿Un negocio un poco arriesgado no? Por lo menos sobre el papel lo parece. Y que pasa ahora si las pelis empiezan a costar 150 millones, 200 o 215 como “El Llanero Solitario”.  ¿Un western con Johny Depp y un niño que salía en “La Red Social” cuesta 215 millones? ¿En serío? Supongamos que Depp se ha llevado 25 millones y otros 5 el director, los guionistas y Arnie Hammer. ¿De verdad que me estás diciendo que te ha costado un western 185 millones de dólares? Me estás tomando el pelo. Te gastas en un western 215 millones que sabes que necesitas que recaude cerca de 1000 millones de dólares… Hagamos un repaso de las pelis que han recaudado más de 1000 millones. Resulta que en los últimos 30 años solo hay 16 pelis que hayan conseguido esto. Y si, son las que os estáis pensando: Avatar, Titanic, El Señor de los Anillos, Harry Potters, los Batman de Nolan, Toy story 3 y las Piratas del Caribe (del director y estrella de El Llanero precisamente). ¿Y sabéis otra cosa? Ninguna de esas superó los 200 millones de dólares de presupuesto, excepto… siiii las dos últimas entregas de los Piratas del Caribe. Que costaron unos 225.
Como presupongo que los señores ejecutivos de Hollywood no son muy dados al altruismo, ni a eso que se llama “amor al arte” se me ocurre pensar “¿Qué cojones estaban pensando al producir un western (oscuro y raruno a más señas) de 215 millones de dólares aún a sabiendas de que para recuperar la inversión lo tienen muuuuy jodido?”. Y algo no me cuadra. Es que los efectos digitales son muy caros dirá alguien por ahí. Cierto, son mucho más caros que cuando en el siglo pasado se iban a rodar al extranjero a lugares exóticos y los del departamento de arte los convertían en lugares fantásticos que no existen o en otros planetas. Mucho más caros que cuando los efectos eran mecánicos y parecían más realistas. Mucho más caros que cuando las explosiones eran de verdad y con maquetas acojonantes que parecían reales. Y cuando la sangre era de verdad, no un programa que genera fluidos y chorros de sangre. Es cierto. Como no pensé en ello antes. Aún así no me acaba de cuadrar. 215 putos millones en un western, una de vaqueros e indios. Guau. A no ser que… no, no puede ser. Es Hollywood, no España. Allí no engañan con los presupuestos. Es la meca del cine ¿cómo van a engañar?
Hace 20-25 años nadie sabía el presupuesto de las películas (o lo sabían solo unos pocos) y a nadie le importaba.  Pero hoy en día no vas a colocar una peli en 3000 salas si tu peli no ha costado de 150 millones en adelante. ¿En que estabas pensando? Necesitas una peli bien cara, llenar todo de publicidad y que al final en el clímax todo sea caos y destrucción. ¿Cómo se explica sino que un guión como “R.I.P.D” que en los 80 hubiera sido una peli bien divertida de la Full Moon, hoy sea un tostón de 120 millones de dólares?
¿Pues sabéis que creo? Si, creo que inflan los presupuestos. Y meten los costes de publicidad, los de distribución, el nuevo descapotable del productor y la coca y las putas de los ejecutivos en el presupuesto. Así de claro.
He leído por ahí al propio Guillermo Del Toro que no cree que haya una tercera parte de Hellboy porque vendría a costar unos 160 millones de dólares. Y nadie va arriesgar eso por una franquicia que no da tanta pasta. Pero, un momento. ¿Cuándo se ha convertido Ron Pearlman en una estrella mundial que yo me he enterado? Porque “Hellboy 2” costo 85 en el 2008. No entiendo como una tercera parte tendría que costar el doble. ¿Por qué no menos? Parece que sea un imposible. Porque entonces no es una peli-evento que la gente vaya como loca a ver al cine, ni las cadenas de cine se pelearan por poner tu peli, ni por bajar su porcentaje de ganancias. Lo que me lleva a “Pacific Rim”.
Los japoneses hacen pelis del tipo de “Pacific Rim” (véase “Godzilla wars”) y se gastan un 10 % de lo que ha costado la cinta de Del Toro, y eso tirando la casa por la ventana. Es cierto que los efectos especiales no son comparables, ni que las estrellas americanas son comparables con los actores japoneses, wait ¿qué estrellas americanas? Charlie Hunnam? Idris Elba? Rinko Kikuchi? Ron Pearlman de nuevo?
Buenos actores y carismáticos pero que todo el reparto junto no cobran ni un cuarto de lo que cobra Johnny Depp.  Bueno, eso está bien, se lo han gastado en producción en vez de en estrellas ¿no? Si y no. Se da la coincidencia de que “Pacific Rim” es la última producción del acuerdo entre Legendary Films y Warner. Y viendo la penúltima “Man of Steel”, no parece que les fuera mal. Pero oye “Man of Steel” costo 225 y lleva recaudados a nivel mundial 670 y se habla de exitazo.  Tan solo hay 35 millones de diferencia entre “Pacific Rim” y “Man of Steel”, porqué me da la sensación de que son muchos más. Por la franquicia (Pacific Rim es un guión original), por reparto (independientemente de cuál nos gusta más el de MOS tiene mucho más cache), por diseño de producción, por equipo técnico (y ojo que con esto no quiero decir que el de MOS sea mejor, solo más caro)y definitivamente por la brutal campaña de promoción del Superman de Snyder en comparación con la tímida de Del Toro (porque no me valen solo unos cartelones en times square sino una presencia mediática constante y generalizada). No me salen las cuentas. Creo que la tendencia es a engordar las cifras y mucho. Porque en Hollywood no tienen que presentar las cuentas a nadie (si a caso al fisco USA, pero esas no nos las van a enseñar) y queda mucho mejor decir (por la espiral de locura en la que hemos entrado) que tu peli cuesta una porrada de millones. Como veis ofrezco muchas preguntas y pocas respuestas. Y le deseo todo lo mejor a Del Toro y su peli de monstruos y robots gigantes, que estoy deseando ver.
Y luego llega “Expediente Warren:  The Conjuring” que cuesta 20 y ya lleva casi 100...  




*No puede ser productora única por las leyes antitrust norteamericanas. Aunque esto no aplica a otros países fuera de USA, donde a veces nos encontramos que una productora produce, distribuye y exhibe la peli en sus propios cines. Curiosamente cuando se da esos casos estamos hablando de conglomerados de mayors norteamericanos.  
**Las cifras están sacadas de la web Box Office Mojo.

domingo, 14 de julio de 2013

¿Cuándo fue la última vez que pasaste miedo con una película?

Y digo miedo de verdad, no digo mal rollo, ni asco, ni angustia. Las últimas cintas que me pusieron la carne de gallina y medieron mal rollo fueron “Ahí va el Diablo” y “The Lords of Salem”. Pero no hablo de eso. Hablo de esa sensación que te tiene en tensión y alerta durante toda la proyección, con un nudo en el estomago y completamente expectante de lo que pasará a continuación. Hablo de gente pasándolo verdaderamente mal en la proyección. Hablo de recordar secuencias de la película días después y sentir un escalofrió recorriéndote la espalda.
Para los que ya somos un poco más veteranos como un servidor esas sensaciones corresponden normalmente a películas que vimos en la adolescencia o incluso en la niñez, en mi caso fueron “El Resplandor (The Shining)”, “Phantasma” y “Poltergeist”.  Pelis que nos provocaban pesadillas e imágenes que se quedaban grabadas en nuestra retina a fuego. Cada uno tiene alguna película que le horrorizo siendo pequeño y que le dejo sin dormir. Cuando uno crece esa sensación se va perdiendo. Incluso esas mismas que antes nos dieron miedo, ahora se ven con menor candidez. Pero de vez en cuando sale alguna película que te recuerda que el cine es capaz de dar miedo. La película que ha conseguido eso conmigo este año hasido “The Conjuring” (Expediente Warren).
The Conjuring (Expediente Warren)" está basada en dos personajes reales, el matrimonio formado por Ed y Lorreine Warren. Esta pareja alcanzo gran notabilidad en los años 70 debido a que estudiaban fenómenos paranormales, en su mayoría fraudes, algunos tan sonados como el que inspiro“Terror en Amityville”.  La pareja la dan vida con asombrosa credibilidad, Patrick Wilson y Vera Farmiga, y este es el primer acierto de una larga serie del director, James Wan. Wan no ha buscado estrellas, ni actores que resulten familiares a los aficionados al género, sino actores convincentes que se dejen la piel en pantalla. Y no solo los investigadores, sino toda la familia protagonista, desde los padres hasta el último de los niños están perfectos. Porque toda la película destila esa autenticidad. De acuerdo, se nos está hablando de casas encantadas, de fantasmas y posesiones pero todo es tan realista que nos convence de que lo que está contando es cierto. La ambientación en la década de los 70 es remarcable,de la misma forma que lo es la fotografía y el sonido. Todo da la sensación de ser palpable. Olvidaos de los efectos digitales de las últimas décadas, todo en “The Conjuring” provoca la sensación de estar asistiendo a una pesadilla. Y todo está tratado de forma muy física, he aquí otro de los grandes logros de la película de Wan. Normalmente en las películas de fantasmas todo es muy etéreo,irreal. Aquí sentimos verdadero temor por la integridad física de esas niñas aterrorizadas y el temor de las pequeñas se transmite al espectador. Uno se revuelve en su butaca a cada nueva secuencia de este tour de forcé que va incrementando su intensidad.

James Wan, responsable de algunos de los títulos más importantes de este siglo en lo que a cine de terror se refiere como son “Saw” y “Insidious” se corona con esta “The Conjuring” como uno de los grandes maestros del terror actuales. Parece como si hubiera aprehendido todas las virtudes de los films citados y hubiera dejado fuera todos los defectos.Une película sin grasa, en la que se nos presenta a unos personajes con los que empatizar (gracias a un guión bien escrito) y los lleva a situaciones extremas y construido de forma tan inteligente que no necesita prácticamente mostrar sangre para asustarnos. No exagero cuando digo que en unos poquitos años hablaremos de “The Conjuring” como una de las grandes obras maestras del terror a la altura de títulos emblemáticos como “El Exorcista” o las nombradas alcomienzo del artículo. Y la referencia al terror cristiano de “El Exorcista” noes gratuita. Puedo decir, sin ruborizarme, que “The Conjuring” va ha hacer más por el cristianismo que el mismo Papa. Así de buena es.